esta noche estaba muy nerviosa porque iban a venir los reyes, y yo quería verlos, porque nunca los había visto, y tiene que molar verlos ahí con los camellos y todo.
y vaya si los vi.
estaba medio dormida cuando oí unos ruidos sonoros. entonces me levanté corriendo, y me choqué con un chino, un turco con sable turco y un negro. además había tres hombres más con ellos, que tenían gafas de sol, y eso que era de noche, y iban con unos trajes muy elegantes.
yo me asusté y les pregunté que quiénes eran. y me dijeron que eran los tres reyes magos. y yo les dije que no me lo creía, porque no veía a los camellos. y ellos me dijeron que los tres hombres elegantes eran camellos encantados, que traían chocolate a l@s niñ@s mal@s. y yo les contesté que eso no es así, que tenían que traer carbón. y ellos me dijeron que el carbón contamina mucho, y que por eso traían chocolate, pero que yo era muy pequeña y muy buena como para que me dejaran el chocolate. pero que se estaban pensando si se lo dejaban a mis padres, que parecía que últimamente les hacía falta.
entonces se fueron a comer lo que les habíamos dejado. y cuando vieron los polvorones y los mazapanes y el vaso de agua, me preguntaron que si no quedaba nada de jamón serrano, queso y vino en esta casa. y yo les dije que no sabía, y me fui a hurgar a la nevera pensando en que estos reyes eran un poco gumias, y que eso no salía en las cabalgatas ni en ningún sitio.
entonces encontré el jamón y el queso y una botella de vino y se lo llevé. y entonces se lo comieron deprisa, que me saltó un perdigón en el ojo del rey chino. y se les veía la comida porque al parecer era costumbre entre ellos comer con la boca abierta, y se veía la pasta que se les había hecho el jamón serrano. y cogieron la botella y no usaron las copas tan bonitas que les llevé, sino que bebieron a morro, así a lo guarro, dejando sus babas y restos de queso y jamón y unos polvorones que comieron al final. y se terminó enseguida la botella, y me pidieron otra, que los camellos tenían sed. y qué raro, porque yo siempre pensé que los camellos bebían agua santa del jordán o, como mucho, del grifo. pero les llevé otra botella de vino.
y entonces me dieron mis regalos, y me dijeron que los fuera abriendo, que me iban a gustar.
abrí el primer regalo, y era un juego de cocinitas, que los había visto en las tiendas de los chinos. y les dije que me gustaba, pero que si me había portado un poco mal y que si por eso no me regalaban uno un poco más decente. el chino me dijo que me había portado muy bien, pero que ese regalo era de parte suya, que era chino, y que tuviera cuidado, porque si usaba mucho la puerta del horno, se rompía. yo le di el beso de rigor y le di las gracias. por cierto, que olía un poco a vino.
el segundo paquete era una ropa de zzzzara kids, y yo les dije que era muy mono el jersey y la falda, y me dijo el turco que era de parte suya, que lo hacían en su país niños y niñas como yo, y que a lo mejor algún día me enseñaba la fábrica, para que viera con qué amor hacían la ropa y qué trabajadores eran aunque eran pequeños como yo. yo le di otro beso, que me rascó un poco la barba, y además me pringó con el moco que se le caía de la nariz.
y después abrí el tercer regalo, que era una pistola de juguete. el negro me dijo que era de parte suya, y que esperaba que fuera aprendiendo a usarla, porque si iba a su país, que al parecer era de los estados unidos de amérikk, la iba a necesitar, y que no me regalaba una de verdad, porque aquí no se llevaba todavía eso de entrar en los colegios disparando a diestro y siniestro y matando a los profes y a los amigos de clase. le di otro beso, y me atufó con su aliento a vino.
los camellos me dijeron que ellos me regalaban su tarjeta de visita, por si cuando fuera más mayor quería chocolate. yo les dije que mamá me compraba ya chocolate, y que muchas gracias de todas maneras, porque nunca hay que desagradecer un regalo.
les dije que eran muy simpáticos, y que me alegraba de haberles conocido, pero que no sabía yo que un rey fuera chino, otro turco y otro negro de estados unidos. y me dijeron que por qué me creía yo que les llamaban los tres reyes de oriente, que china y turquía estaban en oriente, y el negro me dijo que él era un afroamericano en su país, y que lo de afro lo explica todo, porque eso es oriente también.
entonces los reyes magos y los camellos fueron directamente a la nevera, cogiendo el cartón de vino de don simón, y se fueron por la puerta, como las personas normales, en vez de saltar por la ventana. además que me dijeron que se llevaban de recuerdo la tele, el dvd, las joyas de mamá, el portátil de papá y la pulserita de oro que llevaba yo en la muñeca.
y yo me quedé un poco sorprendida, porque comprendí que los mayores nos estaban mintiendo acerca de los reyes magos. y por eso hoy, en mi blog, he decidido desvelar la verdad al mundo sobre los tres reyes magos de oriente y sus camellos.
viernes, 6 de enero de 2006
la vErdaD aUtéNticA SObre lOs Reye$ MaGoS dE OrIEntE
Lo baboseó chüpetina hoy 1/06/2006 09:50:00 a. m.
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12 cosas que dice la gente:
Hija mía...
¿Tú qué te fumas para contar esas historias?
(Guárdame algo, por favor.)
Mira payasa, te escribo aquí sólo para que dejes de poner tus absurdos comentarios en 20 Minutos.
Ni tu weblog tiene gracia, ni te merece la pena estar dando siempre la brasa para que entren 10 despistaos a vomitar.
No quería decirlo, pero al final lo he dicho. :(
Yo no entro a criticar, me fascina como puede haber gente con tanta imaginacion para hacer estas cosas, io no seria capaz, sera k soy mu simple. El caso es k lo k cuentas tiene su gracia. Un saludo
Estimada chüpetina,
No haga caso de esta chusma que sólo sabe insultarla y despreciar sus agudos comentarios.
Hacen mucha falta personas originales como usted y verdades como puños tras ese velo de aparente inocencia infantil :)
Hay que saber leer entre líneas y entender lo que usted quiere decir en cada comentario.
Reciba un afectuoso saludo desde Barcelona.
De nuevo me ha encantado este relato, es de una gran inteligencia. Es una buena forma de criticar el estado actual de las cosas desde los ojos de una niña de 4 años. Sigue así que está muy bien y ni caso a los qu quieran insultarte, no merecen ni ser tenidos en cuenta.
Chupetina Sigue escribiendo Siempre hay criticas constructivas y destructivas tienes que aguantarlas y seguir adelante!!
Saludos!!
Pues sí que tiene mucha gracia tu blog y tus comentarios en 20minutos.
Ni caso le hagas al anónimo que no tiene sentido del humor.
¡Salió la panda de la caspa a defender a la tonta (o al tonto) que escribe este cutre-log!
Bueno, en una cosa lleváis razón: No se trata de criticar su sentido del humor, que por otra parte insisto en que no tiene ni puta gracia lo que escribe y, siempre según mi criterio, el autor/a debería visitar a un loquero.
El problema objetivo es que hay una cosa que se llama SPAM y que es, precisamente, lo que nuestro/a amigo/a viene haciendo desde hace ya tiempo en 20 Minutos.
Pues, fijaos si es grave, el SPAM en ciertas dosis se considera ya hasta delito en muchos países (esto va también para el supuesto policía amigo de chupestiña) y no tengo la menor duda de que los compañeros de 20 Minutos no dudarán en reconocerlo como tal.
Lo dicho. Ahora podéis criticarme a placer y que sea otro el troll oficial del blog. Pero a ver si dejamos de dar por saco...
Saludos.
Odio a Vagabundillo Hablador, no es mas fea porque la han parido a peos. En cuanto a chupetina, calla y chupamela
Tiene mucha mas gracia que otros blogs en los que se critican ideales politicos o cosas similares. Ademas aqui habla de cosas cotidianas de la vida con 1 punto de vista muy simpatico xDD
Eres una pasada escribiendo, sí señor. Esta me ha encantado. Un saludo, chupetina, y no crezcas.
El relato está cojonudo.
Por cierto, ni caso al gilipollas este que estará jodido porque no tendrá ni un voto en lo del 20minutos... o a lo mejor es que no se le levanta y sólo puede joder y dar por culo escribiendo comentarios. Una lástima.
Pues nada, chaval, a mamarla por ahí y a buscarte la vida como puedas.
Por tu parte, Chupetina, sigue así.
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